Tras probar suerte en Huila con el método de matemáticas, la franquicia Kumon decidió lanzar el método de español, pensado en ayudar a la formación de los niños y reducir el analfabetismo en el país.
“El método Kumon matemáticas lleva en la Coordinación de Voluntariados de Huila (Covolhuila) más de 10 años y ha llevado a muchos niños a sobresalir en escuelas y colegios, sintiéndose orgullosos y felices. En la unidad Kumon social, estos niños dan muestra de su empeño por mejorar y desarrollar habilidades, a tal punto, que ya contamos con varios casos de alumnos que se proponen metas a largo, corto y mediano plazo”, expresó el gerente general para Kumon en Colombia, Juan Felipe Cuéllar Vargas.
Funcionarios de estas dos instituciones se reunieron para ofrecer a los estudiantes del país el programa de español, además de una biblioteca que consta de una serie de cuentos, novelas e historias, que ayudarán a fomentar el gusto por la lectura.
Aplicando este nuevo método de la franquicia Kumon se duplicarán los esfuerzos y compromisos para fomentar el desarrollo de la lectura y la escritura con calidad, por medio de un programa que lleva 24 años en Colombia y que ha recogido excelentes resultados en más de 100.000 niños.
La franquicia Kumon llegó a Neiva (capital de Huila) en el 2003 gestionada por Rafael Cuéllar, interesado en que los estudiantes colombianos mejoraran sus habilidades, inicialmente en matemáticas, pero también lo vio como una oportunidad de negocio.
Según Cuéllar Vargas, en la localidad colombiana se han beneficiado cerca de 400 niños del método de la franquicia Kumon, donde los más beneficiados fueron niños desplazados, “es algo muy importante porque hay niños que se superaron, lograron becas, pasaron a mejores colegios, tenemos casos de abogados, administradores, ingenieros, quienes desarrollaron métodos académicos y lograron sus metas”.
El éxito de la franquicia Kumon es el trabajo individualizado, empezando por llenar los huecos vacíos que tiene el estudiante a nivel académico, aportándole las herramientas necesarias en términos de capacidad y concentración de hábitos de estudios. Esto produce que el menor logre realizar los ejercicios que se le van asignando, los cuales van aumentando la dificultad, consiguiendo que los niños avancen progresivamente a su propio ritmo.