La fusión de las franquicias Random House y Penguin, producto de su integración mundial anunciada a principios de abril, ha sacudido el sector editorial de Colombia. Tras la fusión, la nueva empresa tendrá 7 por ciento de la participación en el mercado editorial nacional.
Por el momento, las operaciones de las editoriales a nivel local seguirán funcionando como lo han hecho hasta el momento: Penguin, del grupo británico Pearson, seguirá siendo distribuida por sus importadores directos (en su mayoría librerías independientes), y Random House, del grupo alemán Bertelsmann, continuará editando y distribuyendo los sellos Mondadori, Conecta, Debate, Lumen, Plaza & Janés, Debolsillo y Grijalbo, entre otros.
La fusión de las dos editoriales es la más grande operación del sector a nivel mundial en los últimos seis años, después de que el grupo francés Lagardere comprara Time Warner Books y creara Hachette. Tanto Random House como Penguin hacen parte del las seis más grandes editoriales en inglés.
En el 2012, la primera facturó unos 2.200 millones de dólares y tuvo ingresos operacionales de cerca de US$ 240 millones. La segunda tuvo facturaciones por más de 1.600 millones de dólares y sus ingresos operacionales fueron de US$ 178 millones de dólares. Se espera que la nueva compañía, que pertenece a Random House en un 53 por ciento y a Penguin en un 47, genere ingresos anuales de cerca 4.000 millones de dólares. Bertelsmann aportará al negocio sus divisiones de libros en inglés.